Al iniciar una nueva vida como periodista en una ciudad lejos de casa, David aprecia que es muy bien recibido por el vecino que vive al lado, Robert, un hombre que resulta ser agradable pero bastante entrometido. La relación entre los dos vecinos toma un giro irreversible la noche que David mata accidentalmente a una mujer joven. Robert, dispuesto a proteger a su nuevo amigo, lo empuja a abandonar el cuerpo y le ayuda a ocultar las pruebas. Nada apartará a su preciado vecino de él. Ni el sentimiento de culpa, ni la policía y mucho menos una mujer.